Fernando Greco vive en Nueva York desde hace 40 años, pero su corazón y sus raíces están profundamente ligadas a la Argentina. Maestro pizzero, docente, amante del fútbol y ferviente hincha de Racing Club de Avellaneda, Greco encontró en la pizza uno de los dos grandes vínculos con su país natal —el otro, claro, es el fútbol—.
Durante este verano en Estados Unidos, decidió emprender un viaje por la mítica Ruta 66, llevando la pizza argentina a diferentes comunidades. Su objetivo es claro: difundir el auténtico estilo pizzero argentino, tanto para quienes nunca lo han probado como para aquellos compatriotas que viven lejos y desean reencontrarse con su sabor inconfundible.
En su recorrido, Greco llegó a Borger, Texas, donde fue recibido por la pizzería Just Eats Pizza Company. Allí ofreció una degustación de pizza argentina, compartiendo sus recetas como una forma de compartir sus raíces. La experiencia fue captada por las cámaras de Telemundo Amarillo, que lo entrevistó sobre su travesía.
“Borger me recuerda a mi pueblo natal —contó Greco— porque es un lugar pequeño, donde todos se conocen y se saludan. Son estilos de vida que ya no se ven en las grandes ciudades”.
Su viaje, además, tiene un sueño paralelo: así como recorrió la Ruta 66 llevando la pizza argentina a distintos estados, imagina realizar lo mismo en nuestro país por la Ruta 40, que atraviesa la Argentina de norte a sur, mostrando en cada parada la riqueza y el sabor de una pizza que cada vez gana más reconocimiento internacional.
La pizza argentina, con su masa característica, generosa cobertura de queso y un sabor que conquista a locales y extranjeros, sigue cruzando fronteras gracias a embajadores como Fernando Greco, que la presentan al mundo como parte esencial de la identidad gastronómica del país.
Fuente: Telemundo Amarillo